Curioso cómo perece un viaje. La vida es frágil y ahora lo sé. Imaginaba el tiempo eterno. ¡Infeliz! Imaginaba ser de nuevo la semilla que, cada año, se extrae de lo más profundo de mí. De lo más profundo de ti. Así de repente se consume todo. No hay despedida aunque se despidan todos de …
Aquella muchacha me abrió su boca y echó a reír. Fue una extraña explosión horas antes de Navidad. El mar nos acompañaba al café mientras nuestros propios mundos aguardaban la huella del tiempo. Era una chica fácil y aquél, otro año que moría. Sin darme cuenta, como cada vez, volví a un m…
Septiembre desvelaba una tarde con suaves gasas de viento. Las copas de los árboles tiritaban sobre las baldosas grises de la Plaza Mayor. Una voz esquivó la brisa: "Felicidades, Don Antonio, por su nuevo cargo, partirá pronto, supongo". Imagino que fue aquella ciudad y no otra,…
Aquella muchacha entró en la Oficina de Correos con una pequeña cajita en las manos. "Quiero enviar mis sueños", dijo. El hombre del mostrador pareció no entender la petición de aquella desconocida. "Quiero enviar mis sueños", repitió entonces. "Disculpe, pero nu…
Al cabo de dos horas, decían, ya había hecho la digestión. Ya podías bañarte. Ya podías correr, jugar al fútbol, coger la bicicleta. Todo volvía a tener sentido a las cinco de la tarde cuando, como un explorador, salía a descubrir los alrededores que merodeaban mi mundo. Serie 'El …
La humedad aquí cala los huesos. La noche se esparce entre las luces de la calle y el olor a pólvora. El río ausente deja como un eco extraño. Su lecho hoy está plagado de parques, árboles y algún sábado de mi niñez jugando a la pelota. ¿Qué será de esta ciudad en el futuro? Prendo un cig…
Un tobogán de barro saldó mi deuda con el peligro. En el ardid de una escapatoria, huí del poblado caníbal. Las trochas guarnecidas de hojas de cocotero me alejaban y ocultaban entre la densa humedad de la isla. Al fin descubrí la cueva que perforaba aquella historia y desvelaba el bajel …
La nieve se rige por las mareas del frío, por las ventiscas afiladas. Otorga a la tierra miles de millones de estrellas de hielo. Teje una blanca frazada sobre los campos. Viste la falda de las montañas como una mujer de boda atraviesa el frío con la velocidad del rayo y va devastando tu …