La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) "Vicentale" del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Vicente Aleixandre de Montilla ha programado para este próximo domingo una visita escolar a la Laguna de Jarata, que permitirá a la comunidad educativa contemplar los resultados del proyecto de restauración hidrológica y ambiental que acometió la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía y que, como avanzó Montilla Digital, contó con una inversión próxima a los 270.000 euros, cofinanciados por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER).
La actividad comenzará con una ruta de senderismo que partirá a las 10.30 de la mañana desde el Punto Limpio ubicado en la fase de ampliación del polígono industrial Llanos de Jarata y que podrá realizarse a pie o en bicicleta, tal y como han detallado fuentes de la organización.
El proyecto de rehabilitación hidrológica y ambiental de la Laguna de Jarata que llevó a cabo la Junta de Andalucía a primeros de año consistió en la retirada de sedimentos, la restauración de la cubeta de inundación para albergar hasta 29.146 metros cúbicos de agua y la reforestación perimetral de la laguna con 1.766 ejemplares de 15 especies vegetales. Las obras incluyeron la dotación de señales interpretativas, así como la construcción de una zona de recepción, un sendero y un observatorio de aves.
Con una extensión total de unas 13,4 hectáreas, el terreno sobre el que se asienta la laguna está formado por materiales impermeables pertenecientes al Triásico, muy similares a los de las diferentes lagunas del Sur de la provincia de Córdoba.
La presencia de sal en el suelo y su tendencia a encharcarse en época de lluvias favorecen la proliferación de tarajes, un arbusto perteneciente a la familia Tamaricaceae que se encuentra en el Mediterráneo occidental, aunque también son frecuentes los carrizos.
No obstante, la especie más extendida es de carácter nitrófilo y halófilo. Esta vegetación era utilizada por diferentes aves para anidar, entre las que destacaban cigüeñas, ánades, avefrías, fochas, pollas de agua y limícolas o zancudas. También eran frecuentes los anfibios como sapos y ranas.
Las primeras referencias históricas documentadas sobre la Laguna de Jarata se remontan a 1528, tal y como constan en las Actas Capitulares del Ayuntamiento de Montilla, que aluden a la costumbre de repartir entre los dueños de ganado lanar los aguaderos del término municipal para que en ellos pudieran abrevarse los rebaños.
Varios documentos que se conservan en el Archivo Histórico Local también constatan que en la segunda mitad del siglo XX el paraje de Jarata se transformaba en una laguna, fundamentalmente durante los inviernos más lluviosos. Sin embargo, las captaciones de agua para las labores agrícolas provocaron la desecación de la zona.
Con todo, en el año 1996, uno de los más lluviosos del último siglo, el paraje de Jarata se volvió a encharcar, lo que llevó al Ayuntamiento de Montilla a plantearse la posibilidad de recuperar la laguna. Por ello, en mayo de 1997, el Consistorio solicitó una subvención para actividades de voluntariado ambiental, consistentes en la plantación de vegetación hidrófila en su entorno.
La actividad comenzará con una ruta de senderismo que partirá a las 10.30 de la mañana desde el Punto Limpio ubicado en la fase de ampliación del polígono industrial Llanos de Jarata y que podrá realizarse a pie o en bicicleta, tal y como han detallado fuentes de la organización.
El proyecto de rehabilitación hidrológica y ambiental de la Laguna de Jarata que llevó a cabo la Junta de Andalucía a primeros de año consistió en la retirada de sedimentos, la restauración de la cubeta de inundación para albergar hasta 29.146 metros cúbicos de agua y la reforestación perimetral de la laguna con 1.766 ejemplares de 15 especies vegetales. Las obras incluyeron la dotación de señales interpretativas, así como la construcción de una zona de recepción, un sendero y un observatorio de aves.
Con una extensión total de unas 13,4 hectáreas, el terreno sobre el que se asienta la laguna está formado por materiales impermeables pertenecientes al Triásico, muy similares a los de las diferentes lagunas del Sur de la provincia de Córdoba.

La presencia de sal en el suelo y su tendencia a encharcarse en época de lluvias favorecen la proliferación de tarajes, un arbusto perteneciente a la familia Tamaricaceae que se encuentra en el Mediterráneo occidental, aunque también son frecuentes los carrizos.
No obstante, la especie más extendida es de carácter nitrófilo y halófilo. Esta vegetación era utilizada por diferentes aves para anidar, entre las que destacaban cigüeñas, ánades, avefrías, fochas, pollas de agua y limícolas o zancudas. También eran frecuentes los anfibios como sapos y ranas.
Las primeras referencias históricas documentadas sobre la Laguna de Jarata se remontan a 1528, tal y como constan en las Actas Capitulares del Ayuntamiento de Montilla, que aluden a la costumbre de repartir entre los dueños de ganado lanar los aguaderos del término municipal para que en ellos pudieran abrevarse los rebaños.

Varios documentos que se conservan en el Archivo Histórico Local también constatan que en la segunda mitad del siglo XX el paraje de Jarata se transformaba en una laguna, fundamentalmente durante los inviernos más lluviosos. Sin embargo, las captaciones de agua para las labores agrícolas provocaron la desecación de la zona.
Con todo, en el año 1996, uno de los más lluviosos del último siglo, el paraje de Jarata se volvió a encharcar, lo que llevó al Ayuntamiento de Montilla a plantearse la posibilidad de recuperar la laguna. Por ello, en mayo de 1997, el Consistorio solicitó una subvención para actividades de voluntariado ambiental, consistentes en la plantación de vegetación hidrófila en su entorno.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)

