Las personas cada vez ponen más empeño en sentirse bien, y sobre todo a través de una alimentación que sea más natural y saludable. Por esa razón se pudiera entender que la kombucha sea hoy una bebida tan popular.
La kombucha es una bebida fermentada que ha tenido muchos estudios que demuestran que sí, tiene muchos beneficios para la salud de las personas. Aunque no tiene un sabor que sea fácil de disfrutar para todos, las personas que se acostumbran a su consumo admiten que es una decisión que les cambia la vida.
Hoy la kombucha se encuentra disponible en tiendas y de muchas marcas, incluso artesanales, que tienen presentaciones de calidad. Sin embargo, siempre viene bien conocer cuáles son sus principales ingredientes y en sí, qué es la kombucha.
Esta bebida es un té dulce que se obtiene a través de la fermentación de colonias de bacterias y levaduras que transforman el azúcar del té en alcohol, ácido acético y otros tantos compuestos. Por eso, el sabor de la kombucha es una mezcla de dulzura, acidez y carbonatado.
Sus principales ingredientes son el té negro o el té verde, que son la base de la bebida; el azúcar, que es el alimento principal de las bacterias y levaduras; aparte de la colonia de bacterias y levaduras denominadas SCOBY, que son una colonia especial y que serán los que transformen a la kombucha en una bebida espectacular en cuanto a propiedades para la salud.
Aunque la popularidad de la kombucha es bastante reciente, por lo que la evidencia científica disponible aumenta sobre la marcha, ya hay muchos beneficios que pueden ser palpables en las personas que consumen con frecuencia este té fermentado:
La kombucha es una bebida muy segura para la mayoría de las personas, sin embargo, por los procesos de fermentación que derivan en ingredientes como el alcohol o los carbonatos, es conveniente hacer algunas advertencias:
La kombucha tiene un sabor refrescante y ligeramente ácido, que puede ser una alternativa para las dañinas bebidas azucaradas. Además, se asocia con la buena salud y tiene muchos sabores disponibles en el mercado y de distintas marcas. Eso sí, hay que asesorarse bien en casos concretos.
La kombucha es una bebida fermentada que ha tenido muchos estudios que demuestran que sí, tiene muchos beneficios para la salud de las personas. Aunque no tiene un sabor que sea fácil de disfrutar para todos, las personas que se acostumbran a su consumo admiten que es una decisión que les cambia la vida.
¿Qué es la kombucha y cómo se hace?
Hoy la kombucha se encuentra disponible en tiendas y de muchas marcas, incluso artesanales, que tienen presentaciones de calidad. Sin embargo, siempre viene bien conocer cuáles son sus principales ingredientes y en sí, qué es la kombucha.
Esta bebida es un té dulce que se obtiene a través de la fermentación de colonias de bacterias y levaduras que transforman el azúcar del té en alcohol, ácido acético y otros tantos compuestos. Por eso, el sabor de la kombucha es una mezcla de dulzura, acidez y carbonatado.
Sus principales ingredientes son el té negro o el té verde, que son la base de la bebida; el azúcar, que es el alimento principal de las bacterias y levaduras; aparte de la colonia de bacterias y levaduras denominadas SCOBY, que son una colonia especial y que serán los que transformen a la kombucha en una bebida espectacular en cuanto a propiedades para la salud.
Beneficios para la salud de la kombucha
Aunque la popularidad de la kombucha es bastante reciente, por lo que la evidencia científica disponible aumenta sobre la marcha, ya hay muchos beneficios que pueden ser palpables en las personas que consumen con frecuencia este té fermentado:
- Mejorar la digestión: al ser una bebida probiótica, puede ayudar a equilibrar la flora intestinal y mejorar la digestión.
- Fortalecer el sistema inmunológico: algunos estudios sugieren que los compuestos de la kombucha pueden estimular el sistema inmunológico.
- Tiene propiedades antioxidantes: los polifenoles del té y otros compuestos producidos durante la fermentación actúan como antioxidantes, ayudando a proteger las células del daño.
- Ayudar a controlar el peso: aunque se necesitan más investigaciones, algunos estudios en animales sugieren que la kombucha podría tener efectos beneficiosos sobre el metabolismo y ayudar en la pérdida de peso.
- Reducir el riesgo de enfermedades crónicas: se ha especulado que la kombucha podría ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardíacas, pero se necesitan más estudios para confirmar estos beneficios.
Precauciones al consumir la kombucha
La kombucha es una bebida muy segura para la mayoría de las personas, sin embargo, por los procesos de fermentación que derivan en ingredientes como el alcohol o los carbonatos, es conveniente hacer algunas advertencias:
- Embarazo y lactancia: muchas personas afirman que la kombucha embarazo ha sido una decisión que les ha mejorado en su salud y la salud del bebé. Sin embargo, todo dependerá de la recomendación de un especialista y de cada caso, ya que al contener algunos compuestos como el alcohol, pudiera no ser recomendable.
- Personas con sistemas inmunológicos debilitados: al igual que puede suceder con los adaptógenos, la kombucha es una bebida que tiene una incidencia directa en el sistema inmunológico. Sin embargo, cuando este se encuentra debilitado, los efectos pueden ser muy abruptos y generar más problemas que soluciones.
- Contenido de azúcar: por supuesto, para que la fermentación de las colonias de bacterias y levaduras sea completa, se necesita mucha azúcar. Algunas marcas usan más que otras, y es algo que se debe tener en cuenta si se está limitando el consumo de azúcar.
La kombucha tiene un sabor refrescante y ligeramente ácido, que puede ser una alternativa para las dañinas bebidas azucaradas. Además, se asocia con la buena salud y tiene muchos sabores disponibles en el mercado y de distintas marcas. Eso sí, hay que asesorarse bien en casos concretos.
