El Ayuntamiento de Montilla plantea hasta tres alternativas para la regeneración urbanística del espacio que hoy ocupa la antigua sede de Comisiones Obreras (CCOO), ubicada en el número 7 de la Avenida de Andalucía, en pleno centro urbano, y que deberá ser demolida tras haber sido calificada "en ruina técnica" debido al importante deterioro que ha sufrido en los últimos años.
Tras la aprobación inicial de la descatalogación del edificio por parte del Pleno de la Corporación municipal, el Área de Urbanismo "mantiene abierta la propuesta de delimitación del ámbito de transformación urbanística sobre el conjunto de la manzana", tal y como detalló la teniente de alcalde de Presidencia, Igualdad, Régimen Interior y Modelo de Ciudad, Lidia Bujalance.
El documento técnico, que también afecta a una vivienda particular anexa al edificio sindical, se encuentra ahora en plazo de exposición pública y, como reconoció Lidia Bujalance, "incluye hasta tres variantes de reurbanización, diseñadas con el doble objetivo de permitir la conexión con la Plaza Dolores Ibárruri –para ampliar el espacio abierto de uso público existente en la zona– y de facilitar suelo para la posible ampliación del Centro de Salud", una intervención que vienen solicitando tanto los profesionales sanitarios como los propios usuarios y que, en cualquier caso, debería acometer, la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía.
Paralelamente a la tramitación administrativa de ambos expedientes, la edil montillana –que compareció ante los medios acompañada por el arquitecto municipal, Carlos Cobos– confirmó el acuerdo con el Ministerio de Trabajo y Economía Social, propietario del edificio, para su adquisición por parte del Ayuntamiento a cambio de 75.000 euros, una operación que las arcas municipales deben asumir para poder proceder a la demolición del inmueble.
Tal y como avanzó en primicia Montilla Digital, la Administración General del Estado encargó a finales del año 2022 la redacción de un informe técnico sobre el estado patológico del edificio y sobre su vida útil, en el que se advertía de que la estructura del inmueble es "muy deficiente", tanto por la baja calidad del hormigón empleado en su construcción como por la aluminosis, que se manifiesta en las viguetas de los forjados y que han propiciado el acceso de humedad a las armaduras durante largo tiempo.
"Ello se debe, fundamentalmente, a la alta porosidad y a la carbonatación de los hormigones", sostiene el informe, al que ha tenido acceso este periódico, y que concluye que "debido al alto peligro de degradación de los forjados, por sus características materiales y por las condiciones de humedad sufridas, debido a la configuración arquitectónica de grandes luces de forjados y vigas, así como a su mala calidad y baja resistencia global, el edificio ha agotado su vida útil y sufre peligro de colapsos parciales o total".
Por unanimidad de los grupos municipales, el Pleno ratificó el pasado mes de febrero la modificación del catálogo de edificios protegidos que permitirá al Consistorio adquirir el edificio al Ministerio de Trabajo y Economía Social, administración propietaria de la parcela.
La sede de CCOO, que ocupa una parcela situada entre la Avenida de Andalucía, la calle Blas Infante, la Plaza Dolores Ibárruri y la calle Ciudad de Lima, junto al Centro de Salud, albergó en la pasada década de los sesenta la delegación local de la Organización Sindical Española (OSE) y la Cámara Agraria, mientras que desde 1978 y hasta mediados de la década de los ochenta acogió una Comisaría Local de Policía Nacional.
"La situación de deterioro del edificio de CCOO obliga a redefinir este espacio", reconoció Lidia Bujalance, quien precisó que la "idea principal" del equipo de gobierno es "vincularlo a la Plaza Dolores Ibárruri y recuperarlo para el disfrute de la ciudadanía", por medio de la creación de "un gran espacio en la Avenida de Andalucía, una de las grandes arterias de Montilla y puerta de acceso principal al casco histórico de la ciudad".
La responsable municipal de Urbanismo afirmó que para el equipo de gobierno resulta "primordial" esta actuación en una zona "de tanto tránsito". Para Lidia Bujalance, "es importante que eliminemos puntos de deterioro como este", al tiempo que defendió la necesidad de "ser sensibles a esas demandas que se plantean acerca de la ampliación del Centro de Salud", un asunto que ya forma parte del debate político, tal y como quedó de manifiesto en la última sesión plenaria.
Tras la aprobación inicial de la descatalogación del edificio por parte del Pleno de la Corporación municipal, el Área de Urbanismo "mantiene abierta la propuesta de delimitación del ámbito de transformación urbanística sobre el conjunto de la manzana", tal y como detalló la teniente de alcalde de Presidencia, Igualdad, Régimen Interior y Modelo de Ciudad, Lidia Bujalance.
El documento técnico, que también afecta a una vivienda particular anexa al edificio sindical, se encuentra ahora en plazo de exposición pública y, como reconoció Lidia Bujalance, "incluye hasta tres variantes de reurbanización, diseñadas con el doble objetivo de permitir la conexión con la Plaza Dolores Ibárruri –para ampliar el espacio abierto de uso público existente en la zona– y de facilitar suelo para la posible ampliación del Centro de Salud", una intervención que vienen solicitando tanto los profesionales sanitarios como los propios usuarios y que, en cualquier caso, debería acometer, la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía.
Paralelamente a la tramitación administrativa de ambos expedientes, la edil montillana –que compareció ante los medios acompañada por el arquitecto municipal, Carlos Cobos– confirmó el acuerdo con el Ministerio de Trabajo y Economía Social, propietario del edificio, para su adquisición por parte del Ayuntamiento a cambio de 75.000 euros, una operación que las arcas municipales deben asumir para poder proceder a la demolición del inmueble.
Tal y como avanzó en primicia Montilla Digital, la Administración General del Estado encargó a finales del año 2022 la redacción de un informe técnico sobre el estado patológico del edificio y sobre su vida útil, en el que se advertía de que la estructura del inmueble es "muy deficiente", tanto por la baja calidad del hormigón empleado en su construcción como por la aluminosis, que se manifiesta en las viguetas de los forjados y que han propiciado el acceso de humedad a las armaduras durante largo tiempo.
"Ello se debe, fundamentalmente, a la alta porosidad y a la carbonatación de los hormigones", sostiene el informe, al que ha tenido acceso este periódico, y que concluye que "debido al alto peligro de degradación de los forjados, por sus características materiales y por las condiciones de humedad sufridas, debido a la configuración arquitectónica de grandes luces de forjados y vigas, así como a su mala calidad y baja resistencia global, el edificio ha agotado su vida útil y sufre peligro de colapsos parciales o total".
Por unanimidad de los grupos municipales, el Pleno ratificó el pasado mes de febrero la modificación del catálogo de edificios protegidos que permitirá al Consistorio adquirir el edificio al Ministerio de Trabajo y Economía Social, administración propietaria de la parcela.
La sede de CCOO, que ocupa una parcela situada entre la Avenida de Andalucía, la calle Blas Infante, la Plaza Dolores Ibárruri y la calle Ciudad de Lima, junto al Centro de Salud, albergó en la pasada década de los sesenta la delegación local de la Organización Sindical Española (OSE) y la Cámara Agraria, mientras que desde 1978 y hasta mediados de la década de los ochenta acogió una Comisaría Local de Policía Nacional.
"La situación de deterioro del edificio de CCOO obliga a redefinir este espacio", reconoció Lidia Bujalance, quien precisó que la "idea principal" del equipo de gobierno es "vincularlo a la Plaza Dolores Ibárruri y recuperarlo para el disfrute de la ciudadanía", por medio de la creación de "un gran espacio en la Avenida de Andalucía, una de las grandes arterias de Montilla y puerta de acceso principal al casco histórico de la ciudad".
La responsable municipal de Urbanismo afirmó que para el equipo de gobierno resulta "primordial" esta actuación en una zona "de tanto tránsito". Para Lidia Bujalance, "es importante que eliminemos puntos de deterioro como este", al tiempo que defendió la necesidad de "ser sensibles a esas demandas que se plantean acerca de la ampliación del Centro de Salud", un asunto que ya forma parte del debate político, tal y como quedó de manifiesto en la última sesión plenaria.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR