Montilla cumplía anoche con una de las actividades tradicionales del calendario educativo local: el acto de inauguración oficial del curso escolar que, en torno a un grato momento de convivencia, servía también para que el Ayuntamiento rindiera homenaje a los docentes que han decidido jubilarse durante el último año.
Entre las botas centenarias de Bodegas Alvear, equipos directivos de colegios e institutos, representantes de las asociaciones de madres y padres y miembros de la Corporación respondían a la convocatoria de la Concejalía de Educación que, esta vez, proponía una apertura de curso de “reconocimiento y agradecimiento”, decía el alcalde, Rafael Llamas, a quienes componen en su conjunto la comunidad educativa de Montilla.
“Para esta ciudad, la educación es un pilar importantísimo porque sobre él se construye nuestro modelo de convivencia”, añadía el primer el edil montillano, quien se reafirmó una vez más en “la calidad de nuestros centros educativos, tanto públicos como concertados”, de ahí que instara a “seguir reivindicativos para mantener nuestra oferta educativa, lo último que puede pasar en Montilla es que se cierre un colegio”.
Durante las intervenciones a cargo del director del CEIP San Francisco Solano, Julio César, la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) Vicentale, María José Arjona, y el propio concejal de Educación, Miguel Sánchez, temas como el esfuerzo, el compromiso, la bajada de ratio en las aulas o el aumento de profesorado estuvieron presentes.
Pero, ante todo, volvió a ser una velada emotiva. Como cada año, el acto se convertía en un fuerte abrazo para quienes acaban de cerrar en Montilla su etapa como docentes. Rafi de la Cruz (CEIP San José), Francisco Llopis (CEIP Beato Juan de Ávila), Olimpia Medina (CEIP San José y San Francisco Solano), Natividad Lucena (CEIP San Francisco Solano), Francisco Javier Carmona (Colegio Salesiano), Salvadora Serrano (CEIP Vicente Aleixandre), Rafael Enrique de la Mata e Isabel Lozano (ambos del IES Emilio Canalejo Olmeda).
A todos ellos, Miguel Sánchez se refirió como “maestros con solera” a los que conviene agradecer “su dilatada trayectoria de formación y enseñanza” de la que Montilla sale ganando. Una visita por las bodegas Alvear ponía el broche a este primer acto oficial del nuevo curso escolar.
Entre las botas centenarias de Bodegas Alvear, equipos directivos de colegios e institutos, representantes de las asociaciones de madres y padres y miembros de la Corporación respondían a la convocatoria de la Concejalía de Educación que, esta vez, proponía una apertura de curso de “reconocimiento y agradecimiento”, decía el alcalde, Rafael Llamas, a quienes componen en su conjunto la comunidad educativa de Montilla.
“Para esta ciudad, la educación es un pilar importantísimo porque sobre él se construye nuestro modelo de convivencia”, añadía el primer el edil montillano, quien se reafirmó una vez más en “la calidad de nuestros centros educativos, tanto públicos como concertados”, de ahí que instara a “seguir reivindicativos para mantener nuestra oferta educativa, lo último que puede pasar en Montilla es que se cierre un colegio”.
Durante las intervenciones a cargo del director del CEIP San Francisco Solano, Julio César, la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) Vicentale, María José Arjona, y el propio concejal de Educación, Miguel Sánchez, temas como el esfuerzo, el compromiso, la bajada de ratio en las aulas o el aumento de profesorado estuvieron presentes.
Pero, ante todo, volvió a ser una velada emotiva. Como cada año, el acto se convertía en un fuerte abrazo para quienes acaban de cerrar en Montilla su etapa como docentes. Rafi de la Cruz (CEIP San José), Francisco Llopis (CEIP Beato Juan de Ávila), Olimpia Medina (CEIP San José y San Francisco Solano), Natividad Lucena (CEIP San Francisco Solano), Francisco Javier Carmona (Colegio Salesiano), Salvadora Serrano (CEIP Vicente Aleixandre), Rafael Enrique de la Mata e Isabel Lozano (ambos del IES Emilio Canalejo Olmeda).
A todos ellos, Miguel Sánchez se refirió como “maestros con solera” a los que conviene agradecer “su dilatada trayectoria de formación y enseñanza” de la que Montilla sale ganando. Una visita por las bodegas Alvear ponía el broche a este primer acto oficial del nuevo curso escolar.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍAS: AYUNTAMIENTO DE MONTILLA
FOTOGRAFÍAS: AYUNTAMIENTO DE MONTILLA
