El festival Montijazz Vendimia volverá a sugerir, desde esta misma noche, un viaje sensorial entre jazz y el vino. A las 21.30 horas, Bodegas Alvear abrirá sus puertas para inaugurar el Festival de Jazz de Montilla, un evento que fusiona los ritmos seductores del jazz con el néctar embriagador del vino.
En esta tierra de tradición vitivinícola, Montijazz Vendimia brinda cada año una experiencia única, "transportando al público a un mundo donde la música y el vino se convierten en cómplices", según destacaron los organizadores del evento, la asociación Jazz Amontillado, con la colaboración del Ayuntamiento de Montilla.
El festival Montijazz Vendimia apuesta por una programación ecléctica entre la que destaca, sobre todo, Iván Melon Lewis, ganador del Grammy Latino al Mejor Álbum de Jazz, por su disco Voyager, presentado en los festivales de jazz más prestigiosos de Europa.
El pianista cubano, en formato de trío, es la gran apuesta del festival, junto al trompetista Enriquito Rodríguez, quien llega a Montilla con un espectáculo en el que alterna composiciones propias con un sentido a homenaje a grandes del flamenco como Camarón de la Isla o Enrique Morente.
Fiel a sus principios, Montijazz Vendimia también cede su espacio en cada edición a músicos jóvenes, aunque ya con una importante trayectoria. Es el caso de Belén Martín y Castillo Kazaki. La saxofonista madrileña lidera su propio quinteto desde hace tres años, marcado por la modernidad de su propuesta compositiva y la calidez y el lirismo de su discurso como instrumentista. El cuarteto valenciano, por su parte, se caracteriza por su continua búsqueda de nuevos sonidos, con influencias que van desde el jazz más contemporáneo hasta la música popular, desde hace casi una década.
Son los ingredientes para el menú jazzístico de este fin de semana en Montilla. Estará acompañado por los vinos generosos de Montilla-Moriles en las mágicas instalaciones de Bodegas Alvear, que vuelven a acoger la primera serie de actuaciones, entre hoy y mañana.
Según los promotores del festival, la puesta de largo del Montijazz Vendimia "recordará que, en este rincón del mundo, el vino y el jazz no sólo son bebida y música, sino un viaje sensorial que conecta al público a través de las melodías y el placer de compartir una buena copa de vino".
En esta tierra de tradición vitivinícola, Montijazz Vendimia brinda cada año una experiencia única, "transportando al público a un mundo donde la música y el vino se convierten en cómplices", según destacaron los organizadores del evento, la asociación Jazz Amontillado, con la colaboración del Ayuntamiento de Montilla.
El festival Montijazz Vendimia apuesta por una programación ecléctica entre la que destaca, sobre todo, Iván Melon Lewis, ganador del Grammy Latino al Mejor Álbum de Jazz, por su disco Voyager, presentado en los festivales de jazz más prestigiosos de Europa.
El pianista cubano, en formato de trío, es la gran apuesta del festival, junto al trompetista Enriquito Rodríguez, quien llega a Montilla con un espectáculo en el que alterna composiciones propias con un sentido a homenaje a grandes del flamenco como Camarón de la Isla o Enrique Morente.
Fiel a sus principios, Montijazz Vendimia también cede su espacio en cada edición a músicos jóvenes, aunque ya con una importante trayectoria. Es el caso de Belén Martín y Castillo Kazaki. La saxofonista madrileña lidera su propio quinteto desde hace tres años, marcado por la modernidad de su propuesta compositiva y la calidez y el lirismo de su discurso como instrumentista. El cuarteto valenciano, por su parte, se caracteriza por su continua búsqueda de nuevos sonidos, con influencias que van desde el jazz más contemporáneo hasta la música popular, desde hace casi una década.
Son los ingredientes para el menú jazzístico de este fin de semana en Montilla. Estará acompañado por los vinos generosos de Montilla-Moriles en las mágicas instalaciones de Bodegas Alvear, que vuelven a acoger la primera serie de actuaciones, entre hoy y mañana.
Según los promotores del festival, la puesta de largo del Montijazz Vendimia "recordará que, en este rincón del mundo, el vino y el jazz no sólo son bebida y música, sino un viaje sensorial que conecta al público a través de las melodías y el placer de compartir una buena copa de vino".
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: RAFA JIMÉNEZ
FOTOGRAFÍA: RAFA JIMÉNEZ