La Parroquia de San Francisco Solano acogió al mediodía de ayer la solemne función religiosa con la que la Hermandad Patronal de San Francisco Solano y Nuestra Señora de la Aurora honra cada 14 de julio a El Mejor de los Montillanos y que, un año más, estuvo presidida por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández.
En una ceremonia que contó con la presencia de una decena de ediles de la Corporación municipal del Ayuntamiento de Montilla –con el alcalde, Rafael Llamas, a la cabeza–, el titular de la Diócesis cordobesa destacó la "labor evangelizadora" que desarrolló el patrón de la localidad en Hispanoamérica.
Y es que la huella de este fraile franciscano no solo es visible en la ciudad que lo vio nacer, sino que también se halla impresa en localidades vecinas como Pedro Abad y Montoro o, sobre todo, en aquellos países en los que el Apóstol del Nuevo Mundo difundió el Evangelio, como Perú, Bolivia, Colombia, Chile o Argentina.
De este modo, la Hermandad Patronal de San Francisco Solano y Nuestra Señora de la Aurora puso el broche de oro a los cultos en honor del patrón de Montilla, que arrancaron el pasado 5 de julio en el templo levantado sobre el solar de la que fuera su casa natal.
En esta ocasión, la novena preparatoria ha servido para recaudar fondos con los que poder sufragar la restauración de la imagen de San Francisco Solano, realizada en 1689 y atribuida a la prestigiosa escuela granadina. En efecto, la imagen de San Francisco Solano fue realizada con características propias de José de Mora en el año 1689, por encargo de Francisco Ramírez Muñoz, capellán de la marquesa de Priego.
La escultura muestra al santo patrón con un hábito que cae en pliegues verticales y amplios, y un rostro delgado pero con rasgos firmes, que reflejan una profunda espiritualidad, especialmente en su mirada. En la representación, San Francisco Solano lleva consigo un crucifijo y una concha de plata, mientras que la aureola de santidad también está realizada en plata.
La novena se celebró hasta el pasado jueves y fue oficiada por sacerdotes que guardan una estrecha relación con Montilla o que han nacido en la ciudad, como Juan Laguna Navarro, Miguel Ángel Raigón Rodríguez, Carlos Jesús Gallardo Panadero, Rafael Castro Flores o Antonio Ramírez Climent.
En las vísperas de la festividad del santo patrón tuvo lugar la Vigilia de Adoración Nocturna tras la santa misa, para llegar al día central, el 14 de julio, con la solemne función religiosa, tras la cual se dio a besar el báculo de San Francisco Solano y que, durante el año, se custodia en el convento de Santa Clara.
Ya por la noche, la ceremonia contó como epílogo con una santa misa y la encomendación de Montilla a su patrón, ocupando la sagrada cátedra el rector de la Basílica de San Juan de Ávila, Fernando Suárez Tapiador, que fue el encargado de poner el broche de oro a los cultos en honor de El Santo.
En una ceremonia que contó con la presencia de una decena de ediles de la Corporación municipal del Ayuntamiento de Montilla –con el alcalde, Rafael Llamas, a la cabeza–, el titular de la Diócesis cordobesa destacó la "labor evangelizadora" que desarrolló el patrón de la localidad en Hispanoamérica.
Y es que la huella de este fraile franciscano no solo es visible en la ciudad que lo vio nacer, sino que también se halla impresa en localidades vecinas como Pedro Abad y Montoro o, sobre todo, en aquellos países en los que el Apóstol del Nuevo Mundo difundió el Evangelio, como Perú, Bolivia, Colombia, Chile o Argentina.
De este modo, la Hermandad Patronal de San Francisco Solano y Nuestra Señora de la Aurora puso el broche de oro a los cultos en honor del patrón de Montilla, que arrancaron el pasado 5 de julio en el templo levantado sobre el solar de la que fuera su casa natal.
En esta ocasión, la novena preparatoria ha servido para recaudar fondos con los que poder sufragar la restauración de la imagen de San Francisco Solano, realizada en 1689 y atribuida a la prestigiosa escuela granadina. En efecto, la imagen de San Francisco Solano fue realizada con características propias de José de Mora en el año 1689, por encargo de Francisco Ramírez Muñoz, capellán de la marquesa de Priego.
La escultura muestra al santo patrón con un hábito que cae en pliegues verticales y amplios, y un rostro delgado pero con rasgos firmes, que reflejan una profunda espiritualidad, especialmente en su mirada. En la representación, San Francisco Solano lleva consigo un crucifijo y una concha de plata, mientras que la aureola de santidad también está realizada en plata.
La novena se celebró hasta el pasado jueves y fue oficiada por sacerdotes que guardan una estrecha relación con Montilla o que han nacido en la ciudad, como Juan Laguna Navarro, Miguel Ángel Raigón Rodríguez, Carlos Jesús Gallardo Panadero, Rafael Castro Flores o Antonio Ramírez Climent.
En las vísperas de la festividad del santo patrón tuvo lugar la Vigilia de Adoración Nocturna tras la santa misa, para llegar al día central, el 14 de julio, con la solemne función religiosa, tras la cual se dio a besar el báculo de San Francisco Solano y que, durante el año, se custodia en el convento de Santa Clara.
Ya por la noche, la ceremonia contó como epílogo con una santa misa y la encomendación de Montilla a su patrón, ocupando la sagrada cátedra el rector de la Basílica de San Juan de Ávila, Fernando Suárez Tapiador, que fue el encargado de poner el broche de oro a los cultos en honor de El Santo.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
REPORTAJE GRÁFICO: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
REPORTAJE GRÁFICO: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
