El Hogar de Tardes Mamá Margarita, un proyecto de la Fundación Social Universal (FSU) dirigido a la defensa de los derechos de la infancia y, especialmente, de menores en situación de vulnerabilidad, ha participado en una investigación sobre percepción del bienestar infantil que se ha desarrollado en el marco de un proyecto impulsado por la oenegé Educo.
En total, han sido cerca de doscientos niños y niñas de entre 9 y 17 años y procedentes de cinco municipios andaluces los que han participado en este proyecto de investigación sobre sus percepciones del bienestar. Así, en el proceso de esta investigación se han comparado sus percepciones con las de personas adultas de referencia de sus entornos (madres, padres, educadores y trabajadores sociales), así como de otros niños y niñas en cuatro países de América Latina: Bolivia, Nicaragua, Guatemala y El Salvador.
El informe de la investigación, que lleva por título Luces y sombras en el bienestar: la percepción de niños y niñas, ha sido realizado por Educo, con el apoyo de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo. Asimismo, en el trabajo de consulta con los niños, niñas, adolescentes y personas adultas de referencia han participado la Asociación Entre Amigos, la Fundación Sevilla Acoge, ambas en Sevilla; el CEIP Padre Marchena, en Marchena (Sevilla); la Fundación Social Universal (FSU) en Montilla (Córdoba); la Asociación Alfa (Almanjáyar en Familia) en Granada; y la Asociación Málaga Acoge, en Málaga.
"El trabajo coordinado con estas entidades ha permitido un acercamiento más profundo a la realidad que viven niños y niñas y a conocer aquellos factores que favorecen o dificultan su bienestar", reconoció Fernando Rodríguez Hervella, delegado territorial de Educo en Andalucía.
En sus hallazgos y conclusiones, el informe viene a confirmar que, si bien el acceso a recursos materiales es pieza básica en su bienestar, no es suficiente para explicarlo ni para garantizarlo. Así, de los testimonios de los propios niños y niñas, y en línea con otros estudios realizados, se desprende que el bienestar se asienta en las relaciones, principalmente con sus familias, sus amistades, mascotas y personas de referencia de sus entornos.
“Me siento feliz y siento confianza cuando hablo o le cuento algo a mis amigas”, nos decía una niña de 11 años del Polígono Sur, en Sevilla. O, tal y como nos comentaba un chaval de 15 años del barrio granadino del Almanjáyar, “más responsabilidad y limpieza porque el barrio suele estar sucio”.
En contraste con las percepciones de muchas personas adultas que han participado en este proyecto, los niños y las niñas destacan la importancia de respetar el medio ambiente y la naturaleza, así como de crear entornos salubres y seguros en los que se sientan confiados y protegidos ante cualquier tipo de violencia.
Por otra parte, comparando los hallazgos de este informe con los datos obtenidos en un estudio similar en cuatro países de América Latina (Bolivia, Nicaragua, Guatemala y El Salvador), a pesar de las diferencias culturales y socioeconómicas entre ambos territorios, las prioridades de niños y niñas en cuanto a su bienestar no difieren casi en nada.
Solo se aprecian diferencias en aspectos muy concretos, como la referencia negativa que algunos adolescentes hacen al corte del suministro eléctrico, en el caso del Polígono Sur, o la importancia que los niños y niñas de familias migrantes le otorgan a mantener vínculos con familiares, cultura y costumbres de sus países de origen.
En total, han sido cerca de doscientos niños y niñas de entre 9 y 17 años y procedentes de cinco municipios andaluces los que han participado en este proyecto de investigación sobre sus percepciones del bienestar. Así, en el proceso de esta investigación se han comparado sus percepciones con las de personas adultas de referencia de sus entornos (madres, padres, educadores y trabajadores sociales), así como de otros niños y niñas en cuatro países de América Latina: Bolivia, Nicaragua, Guatemala y El Salvador.
El informe de la investigación, que lleva por título Luces y sombras en el bienestar: la percepción de niños y niñas, ha sido realizado por Educo, con el apoyo de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo. Asimismo, en el trabajo de consulta con los niños, niñas, adolescentes y personas adultas de referencia han participado la Asociación Entre Amigos, la Fundación Sevilla Acoge, ambas en Sevilla; el CEIP Padre Marchena, en Marchena (Sevilla); la Fundación Social Universal (FSU) en Montilla (Córdoba); la Asociación Alfa (Almanjáyar en Familia) en Granada; y la Asociación Málaga Acoge, en Málaga.
"El trabajo coordinado con estas entidades ha permitido un acercamiento más profundo a la realidad que viven niños y niñas y a conocer aquellos factores que favorecen o dificultan su bienestar", reconoció Fernando Rodríguez Hervella, delegado territorial de Educo en Andalucía.
En sus hallazgos y conclusiones, el informe viene a confirmar que, si bien el acceso a recursos materiales es pieza básica en su bienestar, no es suficiente para explicarlo ni para garantizarlo. Así, de los testimonios de los propios niños y niñas, y en línea con otros estudios realizados, se desprende que el bienestar se asienta en las relaciones, principalmente con sus familias, sus amistades, mascotas y personas de referencia de sus entornos.
“Me siento feliz y siento confianza cuando hablo o le cuento algo a mis amigas”, nos decía una niña de 11 años del Polígono Sur, en Sevilla. O, tal y como nos comentaba un chaval de 15 años del barrio granadino del Almanjáyar, “más responsabilidad y limpieza porque el barrio suele estar sucio”.
En contraste con las percepciones de muchas personas adultas que han participado en este proyecto, los niños y las niñas destacan la importancia de respetar el medio ambiente y la naturaleza, así como de crear entornos salubres y seguros en los que se sientan confiados y protegidos ante cualquier tipo de violencia.
Por otra parte, comparando los hallazgos de este informe con los datos obtenidos en un estudio similar en cuatro países de América Latina (Bolivia, Nicaragua, Guatemala y El Salvador), a pesar de las diferencias culturales y socioeconómicas entre ambos territorios, las prioridades de niños y niñas en cuanto a su bienestar no difieren casi en nada.
Solo se aprecian diferencias en aspectos muy concretos, como la referencia negativa que algunos adolescentes hacen al corte del suministro eléctrico, en el caso del Polígono Sur, o la importancia que los niños y niñas de familias migrantes le otorgan a mantener vínculos con familiares, cultura y costumbres de sus países de origen.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR