Montilla Digital se hace eco en su Buzón del Lector de una carta de agradecimiento a la plantilla de Monsecor remitida por Rafael Espuny Moyano. Si desea participar en esta sección, puede enviar un correo electrónico a la Redacción del periódico exponiendo su queja, comentario, sugerencia o relato. Si quiere, puede acompañar su mensaje de alguna fotografía.
En la edulcorada sociedad en la que vivimos se llama “tercera edad” a lo que siempre se ha llamado "vejez". Ésta ha pasado de ser corta, barata y en compañía a larga (por los avances médicos), cara (por los gastos que conlleva) y en soledad (porque los familiares no pueden atender a los ancianos).
Como ejemplo diremos que antes solo iban al asilo los indigentes y, para sus familias, era una vergüenza y hoy van a las residencias los que tienen 1.500 euros, con la satisfacción de sus familiares.
Para aminorar el sufrimiento de estas personas hay una prestación de servicios por parte de la Administración y mi esposa, que los necesita, los recibe por medio de los empleados de Monsecor a nuestra total satisfacción por su profesionalidad y puntualidad. Varios familiares de amigos, que también usan sus servicios, nos confirman la opinión que hemos expuesto.
Como a todos los mayores, no nos gustan los cambios y ojalá que estos servicios que nos prestan sigan siempre con la calidad y cariño a los que estamos acostumbrados los que precisamos de ellos.
En la edulcorada sociedad en la que vivimos se llama “tercera edad” a lo que siempre se ha llamado "vejez". Ésta ha pasado de ser corta, barata y en compañía a larga (por los avances médicos), cara (por los gastos que conlleva) y en soledad (porque los familiares no pueden atender a los ancianos).
Como ejemplo diremos que antes solo iban al asilo los indigentes y, para sus familias, era una vergüenza y hoy van a las residencias los que tienen 1.500 euros, con la satisfacción de sus familiares.
Para aminorar el sufrimiento de estas personas hay una prestación de servicios por parte de la Administración y mi esposa, que los necesita, los recibe por medio de los empleados de Monsecor a nuestra total satisfacción por su profesionalidad y puntualidad. Varios familiares de amigos, que también usan sus servicios, nos confirman la opinión que hemos expuesto.
Como a todos los mayores, no nos gustan los cambios y ojalá que estos servicios que nos prestan sigan siempre con la calidad y cariño a los que estamos acostumbrados los que precisamos de ellos.
RAFAEL ESPUNY MOYANO
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
NOTA: Los comentarios publicados en el Buzón del Lector no representan la opinión de Montilla Digital. En ese sentido, este periódico no hace necesariamente suyas las denuncias, quejas o sugerencias recogidas en este espacio y que han sido enviadas por sus lectores.