Cerrada a cal y canto desde hace años, el que fuera el lugar de nacimientos de varias generaciones de montillanos, la clínica del doctor José Abril Morales, ubicada en la esquina de las calles Diego de Alvear y Hermanos Garnelo, presenta un importante deterioro de varias estancias interiores, así como de la propia fachada, ante la evidente falta de mantenimiento del inmueble.
La acumulación de vegetación en el patio de la conocida como Casa de José Abril, así como del espacio exterior de la construcción inconclusa anexa, ha generado numerosas quejas por parte de los vecinos de la calle Córdoba por los problemas de salubridad que genera la falta de mantenimiento por parte de los propietarios de ambos inmuebles.
Por ello, los técnicos municipales del Área de Urbanismo y Modelo de Ciudad realizaron recientemente una visita a esta casa solariega de finales del siglo XIX, en la que pudieron constatar el mal estado de conservación de la misma, actualmente en venta.
"Los vecinos de las casas colindantes han presentado reiteradas quejas por la presencia de palomas y otros animales en la casa, que se encuentra deshabitada, por eso desde finales de 2018 se está trabajando en localizar a los herederos de José Abril, propietarios de los inmuebles, para que actúen", explicó a Montilla Digital la teniente de alcalde de Urbanismo y Modelo de Ciudad, María Luisa Rodas.
Una situación que, según recoge el informe municipal, ya fue alertada en 2015 sin que se llevaran a cabo todas las medidas estipuladas por el Ayuntamiento, como el mantenimiento periódico de las zonas abiertas, o el cierre de ventanas y otras oquedades a través de una tela metálica que evite el anidamiento de las palomas.
Asimismo, junto al deficiente mantenimiento relacionado con la existencia de vegetación en los patios y en los sistemas de evacuación de aguas, desde Urbanismo apuntan a un "claro incumplimiento" en cuanto al mantenimiento exigido en relación al ornato público por el estado en que se encuentra la fachada a calle Diego de Alvear, una vía enclavada en pleno casco histórico de Montilla y que cuenta con cuatro edificios incluidos en el Catálogo de Elementos protegidos.
En este sentido, la responsable de Urbanismo apuntó que, si bien este informe señala "a modo de aviso" de la necesidad de actuar en la conservación de la fachada, desde el Consistorio no se descarta poner en marcha una "orden específica de actuación de no ser atendida esta petición".
"Esta casa cuenta con una protección que recoge el desarrollo de obras de conservación y mantenimiento, de consolidación, de acondicionamiento, de restauración de elementos estructurales y la restauración parcial dirigidas a mejorar la legibilidad del inmueble", recordó Rodas.
La Casa de José Abril se caracteriza por una cuidada fachada con rasgos de estilo regionalista andaluz, con zócalo de ladrillo con ventanucos para semisótano, gran portada de piedra natural con balcón superior y huecos rectangulares de sencilla fractura en los laterales que son reemplazados por balcones y ventanales con forja en el piso superior.
Por su parte, el segundo inmueble recogido dentro del informe y comunicado funcionalmente con la casa de finales del siglo XIX, una construcción destinada a vivienda unifamiliar, se encuentra paralizada desde hace más de 20 años.
La acumulación de vegetación en el patio de la conocida como Casa de José Abril, así como del espacio exterior de la construcción inconclusa anexa, ha generado numerosas quejas por parte de los vecinos de la calle Córdoba por los problemas de salubridad que genera la falta de mantenimiento por parte de los propietarios de ambos inmuebles.
Por ello, los técnicos municipales del Área de Urbanismo y Modelo de Ciudad realizaron recientemente una visita a esta casa solariega de finales del siglo XIX, en la que pudieron constatar el mal estado de conservación de la misma, actualmente en venta.
"Los vecinos de las casas colindantes han presentado reiteradas quejas por la presencia de palomas y otros animales en la casa, que se encuentra deshabitada, por eso desde finales de 2018 se está trabajando en localizar a los herederos de José Abril, propietarios de los inmuebles, para que actúen", explicó a Montilla Digital la teniente de alcalde de Urbanismo y Modelo de Ciudad, María Luisa Rodas.
Una situación que, según recoge el informe municipal, ya fue alertada en 2015 sin que se llevaran a cabo todas las medidas estipuladas por el Ayuntamiento, como el mantenimiento periódico de las zonas abiertas, o el cierre de ventanas y otras oquedades a través de una tela metálica que evite el anidamiento de las palomas.
Asimismo, junto al deficiente mantenimiento relacionado con la existencia de vegetación en los patios y en los sistemas de evacuación de aguas, desde Urbanismo apuntan a un "claro incumplimiento" en cuanto al mantenimiento exigido en relación al ornato público por el estado en que se encuentra la fachada a calle Diego de Alvear, una vía enclavada en pleno casco histórico de Montilla y que cuenta con cuatro edificios incluidos en el Catálogo de Elementos protegidos.
En este sentido, la responsable de Urbanismo apuntó que, si bien este informe señala "a modo de aviso" de la necesidad de actuar en la conservación de la fachada, desde el Consistorio no se descarta poner en marcha una "orden específica de actuación de no ser atendida esta petición".
"Esta casa cuenta con una protección que recoge el desarrollo de obras de conservación y mantenimiento, de consolidación, de acondicionamiento, de restauración de elementos estructurales y la restauración parcial dirigidas a mejorar la legibilidad del inmueble", recordó Rodas.
La Casa de José Abril se caracteriza por una cuidada fachada con rasgos de estilo regionalista andaluz, con zócalo de ladrillo con ventanucos para semisótano, gran portada de piedra natural con balcón superior y huecos rectangulares de sencilla fractura en los laterales que son reemplazados por balcones y ventanales con forja en el piso superior.
Por su parte, el segundo inmueble recogido dentro del informe y comunicado funcionalmente con la casa de finales del siglo XIX, una construcción destinada a vivienda unifamiliar, se encuentra paralizada desde hace más de 20 años.
I. TÉLLEZ / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR