El precio del kilovatio-hora (kWh) de electricidad subió el pasado año 15,9 por ciento, según el último análisis que ha hecho público hoy FACUA-Consumidores en Acción. De este modo, el coste se situó en una media de 15,39 céntimos (12,10 más el 27,1 por ciento de impuestos indirectos), frente a los 13,28 céntimos del año anterior (10,44 más impuestos).
Así, la factura del usuario medio (366 kWh de consumo mensual y 4,4 kW de potencia) se encareció el año pasado en 87,78 euros. El recibo se situó en 75,52 euros mensuales, mientras que en 2016 estuvo en una media de 68,20 euros, lo que representó una subida del 10,7 por ciento.
"Este enero se ha producido una bajada mensual del 6,1 por ciento en el recibo del usuario medio", detalla FACUA, que añade que se ha situado en 74,81 euros, frente a los 79,69 euros de diciembre. De este modo, el precio medio del kWh en enero ha bajado un 8,1 por ciento con una media de 15,19 céntimos (11,95 más impuestos), mientras que en diciembre estuvo en 16,53 céntimos (12,99 más impuestos).
La asociación critica la "pasividad" del Gobierno ante las "desproporcionadas tarifas de la luz" que, a juicio de FACUA, "denota su escandalosa complicidad con las eléctricas para ayudarles a seguir engordando beneficios anuales milmillonarios a costa de mantener unos escandalosos índices de pobreza energética, cientos de miles de cortes de suministro por falta de capacidad de pago y multitud de familias que se privan del uso de la calefacción en invierno".
FACUA lamenta que, "además de no actuar de manera contundente para reducir unas tarifas que están entre las más elevadas de la UE, el Ministerio de Energía de Álvaro Nadal decidió el año pasado recortar el descuento que representa el bono social, además de establecer limitaciones desproporcionadas para acceder a él".
"La norma que lo regula ha establecido bajísimos niveles de renta como condición para acceder al bono, aunque al tiempo plantea que cualquier familia numerosa, aunque tenga un elevado poder adquisitivo, podrá beneficiarse de él", resalta la organización de consumidores.
Durante el año 2017, el mes con las tarifas más caras fue enero, en el que el usuario medio tuvo que abonar una factura de 87,81 euros, seguido de diciembre, con un recibo de 80,65 euros (con las tarifas aplicadas hasta el día 29). Las menos elevadas se aplicaron en marzo y abril, en los que el recibo representó una media de 70,96 y 70,98 euros, respectivamente. El año 2016 la factura más elevada para el usuario medio fue la de diciembre, 80,23 euros, frente a los 60,03 euros de abril, el mes menos caro.
FACUA realiza sus estudios a partir de las tarifas semirreguladas (PVPC) aplicadas a los usuarios con contadores tradicionales o digitales aún no adaptados a la telegestión. Los datos de consumo y potencia contratada del usuario medio utilizado por FACUA parte de sus análisis sobre decenas de miles de facturas: consume 366 kWh al mes y tiene una potencia contratada de 4,4 kW.
Así, la factura del usuario medio (366 kWh de consumo mensual y 4,4 kW de potencia) se encareció el año pasado en 87,78 euros. El recibo se situó en 75,52 euros mensuales, mientras que en 2016 estuvo en una media de 68,20 euros, lo que representó una subida del 10,7 por ciento.
"Este enero se ha producido una bajada mensual del 6,1 por ciento en el recibo del usuario medio", detalla FACUA, que añade que se ha situado en 74,81 euros, frente a los 79,69 euros de diciembre. De este modo, el precio medio del kWh en enero ha bajado un 8,1 por ciento con una media de 15,19 céntimos (11,95 más impuestos), mientras que en diciembre estuvo en 16,53 céntimos (12,99 más impuestos).
La asociación critica la "pasividad" del Gobierno ante las "desproporcionadas tarifas de la luz" que, a juicio de FACUA, "denota su escandalosa complicidad con las eléctricas para ayudarles a seguir engordando beneficios anuales milmillonarios a costa de mantener unos escandalosos índices de pobreza energética, cientos de miles de cortes de suministro por falta de capacidad de pago y multitud de familias que se privan del uso de la calefacción en invierno".
FACUA lamenta que, "además de no actuar de manera contundente para reducir unas tarifas que están entre las más elevadas de la UE, el Ministerio de Energía de Álvaro Nadal decidió el año pasado recortar el descuento que representa el bono social, además de establecer limitaciones desproporcionadas para acceder a él".
"La norma que lo regula ha establecido bajísimos niveles de renta como condición para acceder al bono, aunque al tiempo plantea que cualquier familia numerosa, aunque tenga un elevado poder adquisitivo, podrá beneficiarse de él", resalta la organización de consumidores.
Durante el año 2017, el mes con las tarifas más caras fue enero, en el que el usuario medio tuvo que abonar una factura de 87,81 euros, seguido de diciembre, con un recibo de 80,65 euros (con las tarifas aplicadas hasta el día 29). Las menos elevadas se aplicaron en marzo y abril, en los que el recibo representó una media de 70,96 y 70,98 euros, respectivamente. El año 2016 la factura más elevada para el usuario medio fue la de diciembre, 80,23 euros, frente a los 60,03 euros de abril, el mes menos caro.
FACUA realiza sus estudios a partir de las tarifas semirreguladas (PVPC) aplicadas a los usuarios con contadores tradicionales o digitales aún no adaptados a la telegestión. Los datos de consumo y potencia contratada del usuario medio utilizado por FACUA parte de sus análisis sobre decenas de miles de facturas: consume 366 kWh al mes y tiene una potencia contratada de 4,4 kW.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL