El sacerdote montillano Juan Laguna Navarro, párroco de Santa María la Mayor de Baena, defendió este fin de semana en la localidad del Guadajoz la importancia de mantener las tradiciones cristianas durante una conferencia enmarcada en las octavas jornadas de formación en Cuaresma de la Ilustre Archicofradía de la Vera Cruz y Nuestro Padre Jesús del Prendimiento. Bajo el título de Siempre se ha hecho así. Las dos caras de los usos y costumbres, la conferencia de Juan Laguna Navarro tenía por objetivo "aportar algunas claves para trasladar de forma adecuada la tradición que hemos recibido".
El sacerdote montillano, que es defensor del Vínculo y Promotor de Justicia del Tribunal Eclesiástico de Córdoba, hizo referencia a los retos que se plantean a las distintas cofradías y hermandades a la hora de "congeniar la tradición y el progreso". A su juicio, "las herencias que hemos recibido tenemos que legarlas a la siguiente generación, ya que nos recuerdan nuestra identidad" y "nos orientan para saber a dónde vamos".
En este sentido, el consiliario de la Ilustre Archicofradía, que estuvo acompañado por su hermano mayor, Antonio Gómez, definió la tradición como "una herencia que nosotros hemos recibido", mientras que calificó los usos y costumbres –los protocolos que se siguen en la Semana Santa– como "la forma de aplicar esa herencia en algún aspecto en concreto en la vida natural de la cofradía".
Nacido en Montilla el 3 de julio de 1979, Juan Laguna Navarro fue ordenado sacerdote el 24 de junio de 2006, poco antes de cumplir los 27 años. Un día más tarde, presidió su primera eucaristía en la Parroquia de Santiago Apóstol de Montilla, donde estuvo acompañado por un sinfín de familiares y amigos. Además, junto al recién estrenado sacerdote, el altar mayor de la iglesia mayor de Montilla contó con el entonces vicario de la Campiña, Mario Iceta, hoy obispo de Bilbao; con el canónigo ya fallecido Antonio León y con el entonces párroco de Santiago, Miguel Varona Villar.
El sacerdote montillano, que es defensor del Vínculo y Promotor de Justicia del Tribunal Eclesiástico de Córdoba, hizo referencia a los retos que se plantean a las distintas cofradías y hermandades a la hora de "congeniar la tradición y el progreso". A su juicio, "las herencias que hemos recibido tenemos que legarlas a la siguiente generación, ya que nos recuerdan nuestra identidad" y "nos orientan para saber a dónde vamos".
En este sentido, el consiliario de la Ilustre Archicofradía, que estuvo acompañado por su hermano mayor, Antonio Gómez, definió la tradición como "una herencia que nosotros hemos recibido", mientras que calificó los usos y costumbres –los protocolos que se siguen en la Semana Santa– como "la forma de aplicar esa herencia en algún aspecto en concreto en la vida natural de la cofradía".
Nacido en Montilla el 3 de julio de 1979, Juan Laguna Navarro fue ordenado sacerdote el 24 de junio de 2006, poco antes de cumplir los 27 años. Un día más tarde, presidió su primera eucaristía en la Parroquia de Santiago Apóstol de Montilla, donde estuvo acompañado por un sinfín de familiares y amigos. Además, junto al recién estrenado sacerdote, el altar mayor de la iglesia mayor de Montilla contó con el entonces vicario de la Campiña, Mario Iceta, hoy obispo de Bilbao; con el canónigo ya fallecido Antonio León y con el entonces párroco de Santiago, Miguel Varona Villar.
JESÚS ORDÓÑEZ / REDACCIÓN