Como es tradicional cada primer viernes de marzo, la imagen del Santísimo Cristo de Medinaceli será hoy expuesta al culto en la Parroquia de Santiago Apóstol, en horario de 9.00 de la mañana a 22.00 de la noche, dando así lugar a una de las estampas más características de la Cuaresma montillana, de la que participan miles de vecinos a lo largo de toda la jornada.
El templo mayor de Montilla, que a partir de las 19.30 de la tarde acogerá una eucaristía, ha preparado 2.500 velas para que los devotos puedan alumbrar la efigie del Cristo y, de paso, contribuir a sufragar los gastos de las obras de restauración que se han acometido en los últimos años.
Hace dos años, la imagen del Santísimo del Cristo de Medinaceli fue venerada, de manera excepcional, en la Ermita de la Rosa, con motivo de las obras que tuvieron lugar en ese momento en la Parroquia de Santiago. De esta manera, las velas que habitualmente son depositadas ante el Santísimo Cristo de Medinaceli en la nave central del templo de La Escuchuela fueron situadas en 2014 en la plaza de La Rosa, ofreciendo así, desde primera hora de la mañana, una imagen inédita en una jornada muy especial y emotiva para muchos montillanos.
Año tras año, unos 3.000 devotos se acercan a venerar la pequeña talla del Santisimo Cristo de Medinaceli, que data de mediados del siglo XX, para cumplir con el ritual de postrarse a orar ante ella y presentarle sus tres deseos o peticiones de rigor, con el fin de que se cumpla alguno de ellos y, de paso, para encenderle las oportunas velas en su honor, como obliga la vieja tradición creada en torno a la imagen de Jesús Preso de Medinaceli, o alguna de sus reproducciones, maniatado con rostro solemne y misericordioso, que se venera desde hace siglos en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli de Madrid.
El acto piadoso tiene su origen en un hecho ocurrido en 1681, cuando la talla de un Nazareno sevillano fue robada y profanada. Arrastrada por las calles de ciudades moriscas, donde recibió toda clase de vejaciones, el Preso resultó seriamente dañado. Para recuperarlo, los trinitarios pagaron un rescate y pudieron trasladarlo a Madrid, donde fue restaurado y se venera con el nombre de El Rescatado de Medinaceli.
Nuestro Padre Jesús de Medinaceli es una imagen de Jesús de Nazaret que evoca el momento de su Pasión cuando Pilatos lo presenta al pueblo. Se encuentra en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli en la capital de España y también es conocido como el Señor de Madrid. Se desconoce con absoluta seguridad quién es el autor, aunque pertenece por su estilo artístico a la escuela sevillana del taller del cordobés Juan de Mesa. La efigie data de la primera mitad del siglo XVII y mide 1,73 metros de altura.
Del mismo modo, la imagen de Nuestro Padre Jesús Rescatado –cuya soberbia talla de vestir, de tamaño natural, con cabeza y manos de talla, puede ser atribuida a las hermanas Cueto, aunque, en todo caso, es una obra de autor anónimo de la escuela local, datable en torno a mediados del siglo XVIII–, será hoy objeto de veneración, a lo largo de esta jornada, en la Parroquia de San Francisco Solano, en horario de 11.00 de la mañana a 13.30 de la tarde, y de 17.00 hasta el inicio de la celebración de la santa misa, que está prevista que se inicie a partir de las 20.00 de la tarde.
Asimismo, la Hermandad Salesiana y Cofradía del Santísimo Cristo de la Juventud en su Presentación al Pueblo, Nuestra Madre María de Nazaret y San Juan Bosco celebrará, igualmente, en la Capilla Beato Miguel Molina de la Residencia Salesiana, un devoto besamanos en honor a sus titulares, en horario de 10.00 de la mañana a 22.00 de la noche.
Será mañana sábado cuando la corporación del Domingo de Ramos montillano celebre en su cuartelillo, situado en la calle Escuela, un Potaje Solidario bajo el lema Colaboremos para formar a los jóvenes con alegría como la hace Don Bosco. De este modo, toda persona que aporte cualquier tipo de material escolar –mochilas, ceras, lápices, gomas de borrar, sacapuntas, tijeras, pegamento, reglas, compases...– será gratificado al mediodía con un plato de potaje de Cuaresma. A continuación, a partir de las 17.30 de la tarde, la hermandad proyectará en el propio cuartelillo una selección fotográfica de Rafa Jiménez, denominada Dentro de un Domingo de Ramos.
El templo mayor de Montilla, que a partir de las 19.30 de la tarde acogerá una eucaristía, ha preparado 2.500 velas para que los devotos puedan alumbrar la efigie del Cristo y, de paso, contribuir a sufragar los gastos de las obras de restauración que se han acometido en los últimos años.
Hace dos años, la imagen del Santísimo del Cristo de Medinaceli fue venerada, de manera excepcional, en la Ermita de la Rosa, con motivo de las obras que tuvieron lugar en ese momento en la Parroquia de Santiago. De esta manera, las velas que habitualmente son depositadas ante el Santísimo Cristo de Medinaceli en la nave central del templo de La Escuchuela fueron situadas en 2014 en la plaza de La Rosa, ofreciendo así, desde primera hora de la mañana, una imagen inédita en una jornada muy especial y emotiva para muchos montillanos.
Año tras año, unos 3.000 devotos se acercan a venerar la pequeña talla del Santisimo Cristo de Medinaceli, que data de mediados del siglo XX, para cumplir con el ritual de postrarse a orar ante ella y presentarle sus tres deseos o peticiones de rigor, con el fin de que se cumpla alguno de ellos y, de paso, para encenderle las oportunas velas en su honor, como obliga la vieja tradición creada en torno a la imagen de Jesús Preso de Medinaceli, o alguna de sus reproducciones, maniatado con rostro solemne y misericordioso, que se venera desde hace siglos en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli de Madrid.
El acto piadoso tiene su origen en un hecho ocurrido en 1681, cuando la talla de un Nazareno sevillano fue robada y profanada. Arrastrada por las calles de ciudades moriscas, donde recibió toda clase de vejaciones, el Preso resultó seriamente dañado. Para recuperarlo, los trinitarios pagaron un rescate y pudieron trasladarlo a Madrid, donde fue restaurado y se venera con el nombre de El Rescatado de Medinaceli.
Nuestro Padre Jesús de Medinaceli es una imagen de Jesús de Nazaret que evoca el momento de su Pasión cuando Pilatos lo presenta al pueblo. Se encuentra en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli en la capital de España y también es conocido como el Señor de Madrid. Se desconoce con absoluta seguridad quién es el autor, aunque pertenece por su estilo artístico a la escuela sevillana del taller del cordobés Juan de Mesa. La efigie data de la primera mitad del siglo XVII y mide 1,73 metros de altura.
Del mismo modo, la imagen de Nuestro Padre Jesús Rescatado –cuya soberbia talla de vestir, de tamaño natural, con cabeza y manos de talla, puede ser atribuida a las hermanas Cueto, aunque, en todo caso, es una obra de autor anónimo de la escuela local, datable en torno a mediados del siglo XVIII–, será hoy objeto de veneración, a lo largo de esta jornada, en la Parroquia de San Francisco Solano, en horario de 11.00 de la mañana a 13.30 de la tarde, y de 17.00 hasta el inicio de la celebración de la santa misa, que está prevista que se inicie a partir de las 20.00 de la tarde.
Asimismo, la Hermandad Salesiana y Cofradía del Santísimo Cristo de la Juventud en su Presentación al Pueblo, Nuestra Madre María de Nazaret y San Juan Bosco celebrará, igualmente, en la Capilla Beato Miguel Molina de la Residencia Salesiana, un devoto besamanos en honor a sus titulares, en horario de 10.00 de la mañana a 22.00 de la noche.
Será mañana sábado cuando la corporación del Domingo de Ramos montillano celebre en su cuartelillo, situado en la calle Escuela, un Potaje Solidario bajo el lema Colaboremos para formar a los jóvenes con alegría como la hace Don Bosco. De este modo, toda persona que aporte cualquier tipo de material escolar –mochilas, ceras, lápices, gomas de borrar, sacapuntas, tijeras, pegamento, reglas, compases...– será gratificado al mediodía con un plato de potaje de Cuaresma. A continuación, a partir de las 17.30 de la tarde, la hermandad proyectará en el propio cuartelillo una selección fotográfica de Rafa Jiménez, denominada Dentro de un Domingo de Ramos.
BENJAMÍN PORTERO DUQUE / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍAS: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍAS: JOSÉ ANTONIO AGUILAR