La habitual tranquilidad de Montalbán se ha visto rota esta mañana por un suceso que ha causado consternación y miedo entre la práctica totalidad de los vecinos de este apacible pueblo de la Campiña Sur cordobesa. En torno a las 11.30 de la mañana, Félix M., un hombre de 35 años, residente en la calle Ancha, a escasos metros del Ayuntamiento, abrió fuego contra dos agentes de la Guardia Civil del destacamento de La Rambla y contra un miembro de la Policía Local de Montalbán que se habían personado en el domicilio familiar para interesarse por unas supuestas amenazas que el presunto autor de los disparos profirió anoche contra los padres de su expareja.
En declaraciones a Montilla Digital, el alcalde de la localidad, Miguel Ruz, detalló que cuando los agentes accedieron al portal de la vivienda, situada frente a la conocida Cafetería Leo, el presunto autor de los hechos abrió fuego contra ellos “sin mediar palabra” y "a bocajarro", a través de la propia cancela de la puerta, alcanzando en el abdomen a uno de los guardias civiles.
Tras el primer disparo, los otros dos agentes que habían resultado ilesos arrastraron al herido hasta la acera de la calle, donde permaneció tumbado y sin perder la consciencia por espacio de veinte minutos, hasta que llegaron los primeros efectivos sanitarios, que decretaron su traslado urgente hasta el Hospital Comarcal de Montilla.
En el centro de La Retamosa fue intervenido quirúrgicamente de las heridas provocadas por el disparo, que le afectó gravemente el estómago y el hígado. Al cierre de esta edición, el pronóstico del agente, natural de Córdoba, es grave, si bien los facultativos médicos confían en que su evolución sea favorable en las próximas 48 horas.
Tras el primer embate, el presunto agresor volvió a abrir fuego contra el segundo guardia civil, que resultó alcanzado en un brazo y en el costado, aunque el impacto de la munición no provocó “ninguna herida abierta”, según detalló a este periódico la vecina que auxilió en primer lugar al agente que permanecía tumbado en el suelo. En este caso, el segundo miembro herido de la Benemérita no requirió intervención quirúrgica y se encuentra fuera de peligro.
De inmediato, tanto la Policía Local de Montalbán como el guardia civil menos grave solicitaron refuerzos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que, rápidamente, movilizaron a unidades procedentes de todos los destacamentos próximos a Montalbán, así como varias unidades de Seguridad Ciudadana de la Comandancia Provincial de Córdoba.
Mientras tanto, el presunto delincuente decidió atrincherarse en el domicilio, donde también se encontraban sus padres. “Yo lo vi subido al tejado de la casa, con una escopeta de caza en la mano”, relató a Montilla Digital un vecino de la calle Ancha, quien aseguró haber escuchado “varios disparos” que hicieron temer a amigos de la familia que hubiera podido atacar a sus padres, algo que finalmente no ocurrió.
Para evitar que pudieran registrarse nuevos heridos, la Guardia Civil acordonó la calle principal del municipio, así como los aledaños de la plaza de Andalucía, donde se concentraron numerosos curiosos, alarmados por el impresionante despliegue policial puesto en marcha, con decenas de guardias civiles fuertemente armados y pertrechados con escudos y chalecos antibala. Asimismo, se desalojaron varias viviendas contiguas, donde había algunos niños.
En torno a las 13.00 horas hizo acto de presencia en el número 52 de la calle Ancha un sargento de la Guardia Civil procedente del Puesto Principal de Montilla, especializado en negociaciones de situaciones críticas, que mantuvo una larga conversación con el presunto autor de los disparos, viejo conocido de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad por episodios violentos y altercados graves de distinta índole.
La tensión se mantuvo en el pueblo por espacio de casi tres horas. No en vano, los agentes obligaron a los vecinos de la calle Ancha a permanecer en el interior de sus viviendas o en establecimientos como la Peña Cultural Recreativa, situada a escasos metros del lugar de los hechos. Pasadas las 14.00 de la tarde, el presunto autor de los disparos depuso su actitud, gracias a la labor del negociador de la Guardia Civil, y fue detenido, generando un “profundo alivio” entre los vecinos del pueblo, tal y como reconoció el propio alcalde.
“Se han pasado momentos de mucha angustia porque Montalbán es un pueblo en el que se vive de manera muy tranquila y muy afable y un hecho de esta naturaleza no se lo puede esperar nadie”, recalcó Miguel Ruz, quien hizo hincapié en “el miedo vivido por los vecinos de la zona, por los clientes de los bares cercanos y por los niños que había en varias casas aledañas y que han tenido que ser desalojados por las Fuerzas de Seguridad”.
Un perfil "problemático"
La totalidad de los vecinos consultados por este periódico coincidieron en resaltar el perfil "problemático" del presunto autor de los hechos. Conocido en Montalbán como "El Nazi", Félix M. habría sido denunciado por su expareja, con la que tiene dos hijos, por supuestas amenazas y trato vejatorio. "Es una persona agresiva, que se califica a sí misma como neonazi", relataron varios jóvenes del municipio, que aseguraron que al presunto autor de los hechos "no se le conoce profesión, aunque todo el mundo sabe a lo que se dedica".
Tal y como detalló a Montilla Digital el alcalde de Montalbán, Miguel Ruz, el desencadenante de los hechos pudo tener lugar tras un episodio de amenazas que el presunto autor de los disparos protagonizó ayer contra la familia de su exmujer, residente en la vecina localidad de La Rambla. "Estas personas pusieron en conocimiento de la Policía Local de La Rambla y de la Guardia Civil esas amenazas y los agentes se desplazaron esta mañana a Montalbán para pedirle explicaciones sobre su comportamiento", relató el regidor montalbeño, quien hizo hincapié en que a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad "no les dio tiempo a nada: sin mediar palabra, le endosó un disparo a bocajarro a uno de ellos".
En declaraciones a Montilla Digital, el alcalde de la localidad, Miguel Ruz, detalló que cuando los agentes accedieron al portal de la vivienda, situada frente a la conocida Cafetería Leo, el presunto autor de los hechos abrió fuego contra ellos “sin mediar palabra” y "a bocajarro", a través de la propia cancela de la puerta, alcanzando en el abdomen a uno de los guardias civiles.
Tras el primer disparo, los otros dos agentes que habían resultado ilesos arrastraron al herido hasta la acera de la calle, donde permaneció tumbado y sin perder la consciencia por espacio de veinte minutos, hasta que llegaron los primeros efectivos sanitarios, que decretaron su traslado urgente hasta el Hospital Comarcal de Montilla.
En el centro de La Retamosa fue intervenido quirúrgicamente de las heridas provocadas por el disparo, que le afectó gravemente el estómago y el hígado. Al cierre de esta edición, el pronóstico del agente, natural de Córdoba, es grave, si bien los facultativos médicos confían en que su evolución sea favorable en las próximas 48 horas.
Tras el primer embate, el presunto agresor volvió a abrir fuego contra el segundo guardia civil, que resultó alcanzado en un brazo y en el costado, aunque el impacto de la munición no provocó “ninguna herida abierta”, según detalló a este periódico la vecina que auxilió en primer lugar al agente que permanecía tumbado en el suelo. En este caso, el segundo miembro herido de la Benemérita no requirió intervención quirúrgica y se encuentra fuera de peligro.
De inmediato, tanto la Policía Local de Montalbán como el guardia civil menos grave solicitaron refuerzos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que, rápidamente, movilizaron a unidades procedentes de todos los destacamentos próximos a Montalbán, así como varias unidades de Seguridad Ciudadana de la Comandancia Provincial de Córdoba.
Mientras tanto, el presunto delincuente decidió atrincherarse en el domicilio, donde también se encontraban sus padres. “Yo lo vi subido al tejado de la casa, con una escopeta de caza en la mano”, relató a Montilla Digital un vecino de la calle Ancha, quien aseguró haber escuchado “varios disparos” que hicieron temer a amigos de la familia que hubiera podido atacar a sus padres, algo que finalmente no ocurrió.
Para evitar que pudieran registrarse nuevos heridos, la Guardia Civil acordonó la calle principal del municipio, así como los aledaños de la plaza de Andalucía, donde se concentraron numerosos curiosos, alarmados por el impresionante despliegue policial puesto en marcha, con decenas de guardias civiles fuertemente armados y pertrechados con escudos y chalecos antibala. Asimismo, se desalojaron varias viviendas contiguas, donde había algunos niños.
En torno a las 13.00 horas hizo acto de presencia en el número 52 de la calle Ancha un sargento de la Guardia Civil procedente del Puesto Principal de Montilla, especializado en negociaciones de situaciones críticas, que mantuvo una larga conversación con el presunto autor de los disparos, viejo conocido de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad por episodios violentos y altercados graves de distinta índole.
La tensión se mantuvo en el pueblo por espacio de casi tres horas. No en vano, los agentes obligaron a los vecinos de la calle Ancha a permanecer en el interior de sus viviendas o en establecimientos como la Peña Cultural Recreativa, situada a escasos metros del lugar de los hechos. Pasadas las 14.00 de la tarde, el presunto autor de los disparos depuso su actitud, gracias a la labor del negociador de la Guardia Civil, y fue detenido, generando un “profundo alivio” entre los vecinos del pueblo, tal y como reconoció el propio alcalde.
“Se han pasado momentos de mucha angustia porque Montalbán es un pueblo en el que se vive de manera muy tranquila y muy afable y un hecho de esta naturaleza no se lo puede esperar nadie”, recalcó Miguel Ruz, quien hizo hincapié en “el miedo vivido por los vecinos de la zona, por los clientes de los bares cercanos y por los niños que había en varias casas aledañas y que han tenido que ser desalojados por las Fuerzas de Seguridad”.
Un perfil "problemático"
La totalidad de los vecinos consultados por este periódico coincidieron en resaltar el perfil "problemático" del presunto autor de los hechos. Conocido en Montalbán como "El Nazi", Félix M. habría sido denunciado por su expareja, con la que tiene dos hijos, por supuestas amenazas y trato vejatorio. "Es una persona agresiva, que se califica a sí misma como neonazi", relataron varios jóvenes del municipio, que aseguraron que al presunto autor de los hechos "no se le conoce profesión, aunque todo el mundo sabe a lo que se dedica".
Tal y como detalló a Montilla Digital el alcalde de Montalbán, Miguel Ruz, el desencadenante de los hechos pudo tener lugar tras un episodio de amenazas que el presunto autor de los disparos protagonizó ayer contra la familia de su exmujer, residente en la vecina localidad de La Rambla. "Estas personas pusieron en conocimiento de la Policía Local de La Rambla y de la Guardia Civil esas amenazas y los agentes se desplazaron esta mañana a Montalbán para pedirle explicaciones sobre su comportamiento", relató el regidor montalbeño, quien hizo hincapié en que a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad "no les dio tiempo a nada: sin mediar palabra, le endosó un disparo a bocajarro a uno de ellos".
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
REPORTAJE GRÁFICO: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
REPORTAJE GRÁFICO: JOSÉ ANTONIO AGUILAR