Montilla afronta una semana crucial para esclarecer su futuro más inmediato. El ajustado reparto de concejales entre las tres fuerzas políticas más votadas en las elecciones municipales del pasado 24 de mayo –Partido Popular, PSOE e Izquierda Unida– plantea un escenario más complejo, en el que los acuerdos de gobierno, ya sean puntuales o más estables, se tornan esenciales para garantizar la estabilidad en el Ayuntamiento.
Los siete concejales logrados por el PP –que a punto estuvieron de ser ocho si el PA hubiera arañado cinco votos menos– resultan insuficientes para garantizar la investidura de Federico Cabello de Alba como alcalde de Montilla. Y es que el "ninguneo constante" que, según la oposición, ha mostrado el regidor popular hacia los ediles de PSOE, IU y PA durante sus cuatro años de mandato complican una posible abstención de los mismos –mucho menos un apoyo explícito– el próximo 13 de junio.
Con todo, Cabello de Alba no ha tenido más remedio que seguir esa especie de protocolo no escrito que establece cómo comportarse ante situaciones de este tipo y ha sondeado ya el posicionamiento del PA –que este fin de semana ha llegado a valorar su propia disolución en una convención nacional celebrada en Antequera– y de IU, con la idea de ir planificando el futuro político más inmediato. Pero no solo el de Montilla, que por el momento se mantiene en suspense, sino el suyo personal también.
Y es que, como reconocen algunos dirigentes del partido consultados por este periódico, la difícil situación de José Antonio Nieto para continuar al frente del Ayuntamiento de Córdoba podría animar al presidente provincial de los populares a encabezar la próxima candidatura al Congreso de los Diputados en las generales de otoño, relegando así a Cabello de Alba a puestos "menos confortables" y con menos garantías de éxito para mantener el escaño en la Carrera de San Jerónimo.
Sea como fuere, el regidor montillano en funciones deberá agotar todas las vías a su alcance para mantener la Alcaldía de un municipio que, como reconoció el presidente del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, es "emblemático" porque es "una referencia en toda Andalucía". Sin embargo, en una decisión que ha causado sorpresa en sus propias filas, Cabello de Alba ha evitado por el momento abrir una vía de contacto con los socialistas que, a pesar de sumar 526 votos menos, contarán con el mismo número de concejales en el Ayuntamiento.
Lo que podría entenderse como el último menosprecio de Cabello de Alba a su principal rival político, el arquitecto montillano Rafael Llamas, no ha impedido que PSOE e IU hayan mantenido ya el primer encuentro para abordar un posible cambio de gobierno en el número diez de la Puerta de Aguilar. Y esta primera reunión tuvo lugar el pasado viernes. Ni antes ni después. Y en la calle Fuentes, para más señas.
La coordinadora local de IU, Conchi Espejo, afrontó esta primera toma de contacto después de haber trasladado al propio alcalde en funciones su intención de escuchar a los socialistas que, un día antes, habían aprobado en asamblea "iniciar conversaciones" para propiciar un "gobierno de progreso" en el municipio.
Al margen de las negociaciones que se han abierto en el ámbito municipal –y que no han dado para mucho más de lo narrado hasta el momento–, los movimientos que han empezado ya a sucederse con carácter más general parecen también apuntar a que Federico Cabello de Alba no revalidará la Alcaldía el próximo 13 de junio. No en vano, la Comisión Ejecutiva Regional de IULV-CA aprobó este viernes en Sevilla un "método marco de actuación" para aquellos municipios en los que, como Montilla, sus concejales son "determinantes para formar gobierno".
Según avanzó en la capital hispalense el secretario de Organización, Toni Valero, "allí donde haya posibilidad de facilitar la investidura de un alcalde que no sea de IU o donde se decida formar parte del gobierno municipal junto con otras fuerzas políticas, lo primero que se deberá plantear es un diálogo con otras fuerzas políticas sobre una serie de propuestas programáticas bajo los ejes de transparencia y de lucha contra la corrupción, así como de defensa de los servicios públicos y de fomento de las economías locales y de la creación de empleo".
"Allí donde se planteen cogobiernos municipales con la participación de IU y previo descarte, en cualquier caso, de gobiernos con el Partido Popular, las condiciones pasan por un listado de 21 medidas concretas", reiteró el responsable de Organización de IULV-CA, quien instó a las direcciones locales de la coalición a mantener informada en todo momento a la militancia respecto a las negociaciones que se vayan produciendo.
En cualquier caso, los votos de investidura y los pactos de gobierno deberán ser refrendados por los militantes y simpatizantes antes del 11 de junio. De hecho, la Ejecutiva andaluza de IU ha aprobado ya un modelo único de referéndum en el que, además de preguntar por el posicionamiento de sus ediles en la sesión de investidura, somete a la consideración de la militancia el establecimiento de pactos de gobierno con otras fuerzas.
Los siete concejales logrados por el PP –que a punto estuvieron de ser ocho si el PA hubiera arañado cinco votos menos– resultan insuficientes para garantizar la investidura de Federico Cabello de Alba como alcalde de Montilla. Y es que el "ninguneo constante" que, según la oposición, ha mostrado el regidor popular hacia los ediles de PSOE, IU y PA durante sus cuatro años de mandato complican una posible abstención de los mismos –mucho menos un apoyo explícito– el próximo 13 de junio.
Con todo, Cabello de Alba no ha tenido más remedio que seguir esa especie de protocolo no escrito que establece cómo comportarse ante situaciones de este tipo y ha sondeado ya el posicionamiento del PA –que este fin de semana ha llegado a valorar su propia disolución en una convención nacional celebrada en Antequera– y de IU, con la idea de ir planificando el futuro político más inmediato. Pero no solo el de Montilla, que por el momento se mantiene en suspense, sino el suyo personal también.
Y es que, como reconocen algunos dirigentes del partido consultados por este periódico, la difícil situación de José Antonio Nieto para continuar al frente del Ayuntamiento de Córdoba podría animar al presidente provincial de los populares a encabezar la próxima candidatura al Congreso de los Diputados en las generales de otoño, relegando así a Cabello de Alba a puestos "menos confortables" y con menos garantías de éxito para mantener el escaño en la Carrera de San Jerónimo.
Sea como fuere, el regidor montillano en funciones deberá agotar todas las vías a su alcance para mantener la Alcaldía de un municipio que, como reconoció el presidente del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, es "emblemático" porque es "una referencia en toda Andalucía". Sin embargo, en una decisión que ha causado sorpresa en sus propias filas, Cabello de Alba ha evitado por el momento abrir una vía de contacto con los socialistas que, a pesar de sumar 526 votos menos, contarán con el mismo número de concejales en el Ayuntamiento.
Lo que podría entenderse como el último menosprecio de Cabello de Alba a su principal rival político, el arquitecto montillano Rafael Llamas, no ha impedido que PSOE e IU hayan mantenido ya el primer encuentro para abordar un posible cambio de gobierno en el número diez de la Puerta de Aguilar. Y esta primera reunión tuvo lugar el pasado viernes. Ni antes ni después. Y en la calle Fuentes, para más señas.
La coordinadora local de IU, Conchi Espejo, afrontó esta primera toma de contacto después de haber trasladado al propio alcalde en funciones su intención de escuchar a los socialistas que, un día antes, habían aprobado en asamblea "iniciar conversaciones" para propiciar un "gobierno de progreso" en el municipio.
Al margen de las negociaciones que se han abierto en el ámbito municipal –y que no han dado para mucho más de lo narrado hasta el momento–, los movimientos que han empezado ya a sucederse con carácter más general parecen también apuntar a que Federico Cabello de Alba no revalidará la Alcaldía el próximo 13 de junio. No en vano, la Comisión Ejecutiva Regional de IULV-CA aprobó este viernes en Sevilla un "método marco de actuación" para aquellos municipios en los que, como Montilla, sus concejales son "determinantes para formar gobierno".
Según avanzó en la capital hispalense el secretario de Organización, Toni Valero, "allí donde haya posibilidad de facilitar la investidura de un alcalde que no sea de IU o donde se decida formar parte del gobierno municipal junto con otras fuerzas políticas, lo primero que se deberá plantear es un diálogo con otras fuerzas políticas sobre una serie de propuestas programáticas bajo los ejes de transparencia y de lucha contra la corrupción, así como de defensa de los servicios públicos y de fomento de las economías locales y de la creación de empleo".
"Allí donde se planteen cogobiernos municipales con la participación de IU y previo descarte, en cualquier caso, de gobiernos con el Partido Popular, las condiciones pasan por un listado de 21 medidas concretas", reiteró el responsable de Organización de IULV-CA, quien instó a las direcciones locales de la coalición a mantener informada en todo momento a la militancia respecto a las negociaciones que se vayan produciendo.
En cualquier caso, los votos de investidura y los pactos de gobierno deberán ser refrendados por los militantes y simpatizantes antes del 11 de junio. De hecho, la Ejecutiva andaluza de IU ha aprobado ya un modelo único de referéndum en el que, además de preguntar por el posicionamiento de sus ediles en la sesión de investidura, somete a la consideración de la militancia el establecimiento de pactos de gobierno con otras fuerzas.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR