La polémica que rodea al colector de Santa María sumó ayer un nuevo episodio. Apenas cuatro días después de que el teniente de alcalde de Hacienda, Miguel Navarro, que preside el consejo de administración de Aguas de Montilla, fijase en torno a la segunda quincena de abril la finalización de las obras, el alcalde de la localidad, Federico Cabello de Alba, situó el inicio de las mismas entre los meses de abril y mayo.
El regidor popular compareció ante los medios de comunicación para tratar de desmentir al candidato socialista a la Alcaldía de Montilla, Rafael Llamas, quien el pasado viernes acusó al PP de trasladar una "información errónea" a los vecinos. "Nos encontramos ante un equipo de gobierno incapaz de gestionar los problemas de los ciudadanos y que los confunde, faltando a la verdad", denunció Llamas, que situó "entre cuatro y cinco meses" el inicio de las actuaciones en Santa María.
Lejos de reconocer un posible baile de fechas en la información que ofreció Miguel Navarro, el alcalde apuntó que "no se puede uno acoger a la palabra exacta" para transmitir una sensación distinta a la que el teniente de alcalde de Hacienda deseaba hacer llegar a los ciudadanos.
"Los plazos son conocidos desde el mes de septiembre y, al ser plazos legales, son ineludibles", dijo ayer Federico Cabello de Alba, quien aclaró que las empresas que han sido invitadas por Aguas de Montilla para acometer las actuaciones tienen hasta el próximo 5 de marzo para presentar su proyecto.
"A partir de ahí, lo que aconsejan los técnicos es que la redacción de un proyecto de esa magnitud pueda estar alrededor de los dos meses", dijo Cabello de Alba, que situó el comienzo de las obras "entre abril y mayo", con lo que el grueso de las actuaciones, tal y como reconoció el primer edil, "se va a realizar durante este verano".
"Nosotros no tenemos ningún interés en esconder a los vecinos que las obras tienen que ser así porque son de mucha enjundia", dijo el alcalde, quien ofreció un recorrido cronológico de los hechos desde el hundimiento que se registró en la zona el 17 de septiembre del pasado año y que obligó al Consistorio a decretar el desalojo de dos viviendas. "No se ha perdido ni un solo día", aseveró Cabello de Alba para, a continuación, achacar al "tacticismo político" de la oposición "el retraso que en estos momentos llevan las obras".
Con respecto a los "peligros para la salud pública" de los que alertaron los portavoces del PSOE y del PA, así como los propios vecinos de la zona –que denunciaron la proliferación de ratas y la incidencia de "olores nauseabundos"–, el alcalde aseguró que "no hay ni un solo informe que advierta, en ningún momento del proceso, que [la situación del colector] puede suponer un problema sanitario para los vecinos".
El regidor popular compareció ante los medios de comunicación para tratar de desmentir al candidato socialista a la Alcaldía de Montilla, Rafael Llamas, quien el pasado viernes acusó al PP de trasladar una "información errónea" a los vecinos. "Nos encontramos ante un equipo de gobierno incapaz de gestionar los problemas de los ciudadanos y que los confunde, faltando a la verdad", denunció Llamas, que situó "entre cuatro y cinco meses" el inicio de las actuaciones en Santa María.
Lejos de reconocer un posible baile de fechas en la información que ofreció Miguel Navarro, el alcalde apuntó que "no se puede uno acoger a la palabra exacta" para transmitir una sensación distinta a la que el teniente de alcalde de Hacienda deseaba hacer llegar a los ciudadanos.
"Los plazos son conocidos desde el mes de septiembre y, al ser plazos legales, son ineludibles", dijo ayer Federico Cabello de Alba, quien aclaró que las empresas que han sido invitadas por Aguas de Montilla para acometer las actuaciones tienen hasta el próximo 5 de marzo para presentar su proyecto.
"A partir de ahí, lo que aconsejan los técnicos es que la redacción de un proyecto de esa magnitud pueda estar alrededor de los dos meses", dijo Cabello de Alba, que situó el comienzo de las obras "entre abril y mayo", con lo que el grueso de las actuaciones, tal y como reconoció el primer edil, "se va a realizar durante este verano".
"Nosotros no tenemos ningún interés en esconder a los vecinos que las obras tienen que ser así porque son de mucha enjundia", dijo el alcalde, quien ofreció un recorrido cronológico de los hechos desde el hundimiento que se registró en la zona el 17 de septiembre del pasado año y que obligó al Consistorio a decretar el desalojo de dos viviendas. "No se ha perdido ni un solo día", aseveró Cabello de Alba para, a continuación, achacar al "tacticismo político" de la oposición "el retraso que en estos momentos llevan las obras".
Con respecto a los "peligros para la salud pública" de los que alertaron los portavoces del PSOE y del PA, así como los propios vecinos de la zona –que denunciaron la proliferación de ratas y la incidencia de "olores nauseabundos"–, el alcalde aseguró que "no hay ni un solo informe que advierta, en ningún momento del proceso, que [la situación del colector] puede suponer un problema sanitario para los vecinos".
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR