El joven montillano que fue detenido en la tarde-noche del pasado jueves tras reconocer su implicación en la muerte violenta de su madre pasará a lo largo de la mañana de hoy a disposición de la Fiscalía de Menores. Así lo confirmaron ayer a Montilla Digital fuentes próximas a la investigación, que aseguraron que el adolescente, que el pasado 12 de octubre cumplió 17 años, ha pasado la noche en los calabozos de la Comandancia Provincial de la Guardia Civil, en la avenida Medina Azahara de la capital.
Tal y como avanzó en primicia este periódico, los hechos se desencadenaron pasadas las 19.00 de la tarde del jueves, cuando un vecino de la casa de campo donde residía la víctima junto a sus dos hijos conoció, por boca del propio menor, que su madre, una mujer de 47 años, se hallaba muerta en el interior del domicilio.
Tras recibir aviso de este testigo, la Guardia Civil movilizó varias patrullas que se dirigieron hasta la vivienda, situada entre los arroyos de Guta y de La Campiñuela, a unos cinco kilómetros del centro urbano de Montilla, donde hallaron el cuerpo sin vida de la mujer, con evidentes signos de violencia.
Varios testigos corroboraron además el “ensañamiento” que habría sufrido la víctima a manos de su agresor o agresores, si bien deberá ser el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de la capital el que determine finalmente la causa exacta del fallecimiento, tras haber practicado ayer la autopsia al cadáver de la mujer, cuyos resultados no han trascendido.
Las mismas fuentes aseguraron a Montilla Digital que fue el propio hijo menor de edad el que confesó a los agentes de la Benemérita su participación en el crimen, implicando en los hechos a un hermano de 21 años que, en ese mismo momento, comenzó a ser buscado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Según ha podido saber este periódico, la línea principal de investigación descartaría la implicación en los hechos del mayor de los hijos, que en la mañana del mismo jueves habría viajado en compañía de un familiar hasta una localidad de la Costa del Sol para vender unos enseres domésticos en un anticuario.
Pese a que durante buena parte de la jornada de ayer se sostuvo desde diferentes ámbitos que el mayor de los vástagos había sido localizado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en la ciudad malagueña de Fuengirola –donde residía de manera esporádica en un apartamento que comparte con conocidos–, ninguna fuente oficial confirmó su detención ni su puesta a disposición judicial.
Y es que, tal y como reconoció en la tarde de ayer el nuevo secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, la Policía Científica y la Guardia Civil mantienen abierta la investigación para esclarecer las circunstancias de un hecho que el propio Nieto calificó de “complejo” y “trágico”.
Preguntado por los detalles del presunto parricidio, José Antonio Nieto hizo hincapié en que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tratan de “garantizar, por encima de cualquier otra cosa, los derechos de todas las personas, con la presunción de inocencia, las garantías que se deben otorgar a cualquier ciudadano y el desarrollo adecuado de la investigación". En ese sentido, alabó el trabajo desarrollado por la Guardia Civil afirmando que "la respuesta ante este hecho terrible ha sido inmediata”.
“Hay una tranquilidad en que los pasos que se dan son seguros y van en la dirección correcta”, señaló el secretario de Estado de Seguridad, quien hizo hincapié en que “la investigación es rápida y va bien”.
Violencia en el ámbito familiar
Por otro lado, la Subdelegación del Gobierno expresó ayer su condena por los hechos registrados en Montilla. La hipótesis principal defiende que la agresión a la mujer se produjo en el interior del domicilio familiar, tras una fuerte discusión, fruto de las “frecuentes desavenencias” que tenían lugar entre la madre y los dos hijos.
"Era una familia desestructurada, que recibía ayuda de mediación por los conflictos familiares existentes, aunque no existía ningún indicio de que la situación pudiera acabar de la forma en la que lo ha hecho", aseguró el alcalde de Montilla, Rafael Llamas. No en vano, fuentes próximas a la investigación aseguraron ayer a este periódico que el ahora detenido se encontraba prestando servicios en beneficio de la comunidad en el Pabellón Municipal de Deportes como resultado de una pelea en la que se vio envuelto hace unas semanas.
Tal y como avanzó en primicia este periódico, los hechos se desencadenaron pasadas las 19.00 de la tarde del jueves, cuando un vecino de la casa de campo donde residía la víctima junto a sus dos hijos conoció, por boca del propio menor, que su madre, una mujer de 47 años, se hallaba muerta en el interior del domicilio.
Tras recibir aviso de este testigo, la Guardia Civil movilizó varias patrullas que se dirigieron hasta la vivienda, situada entre los arroyos de Guta y de La Campiñuela, a unos cinco kilómetros del centro urbano de Montilla, donde hallaron el cuerpo sin vida de la mujer, con evidentes signos de violencia.
Varios testigos corroboraron además el “ensañamiento” que habría sufrido la víctima a manos de su agresor o agresores, si bien deberá ser el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de la capital el que determine finalmente la causa exacta del fallecimiento, tras haber practicado ayer la autopsia al cadáver de la mujer, cuyos resultados no han trascendido.
Las mismas fuentes aseguraron a Montilla Digital que fue el propio hijo menor de edad el que confesó a los agentes de la Benemérita su participación en el crimen, implicando en los hechos a un hermano de 21 años que, en ese mismo momento, comenzó a ser buscado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Según ha podido saber este periódico, la línea principal de investigación descartaría la implicación en los hechos del mayor de los hijos, que en la mañana del mismo jueves habría viajado en compañía de un familiar hasta una localidad de la Costa del Sol para vender unos enseres domésticos en un anticuario.
Pese a que durante buena parte de la jornada de ayer se sostuvo desde diferentes ámbitos que el mayor de los vástagos había sido localizado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en la ciudad malagueña de Fuengirola –donde residía de manera esporádica en un apartamento que comparte con conocidos–, ninguna fuente oficial confirmó su detención ni su puesta a disposición judicial.
Y es que, tal y como reconoció en la tarde de ayer el nuevo secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, la Policía Científica y la Guardia Civil mantienen abierta la investigación para esclarecer las circunstancias de un hecho que el propio Nieto calificó de “complejo” y “trágico”.
Preguntado por los detalles del presunto parricidio, José Antonio Nieto hizo hincapié en que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tratan de “garantizar, por encima de cualquier otra cosa, los derechos de todas las personas, con la presunción de inocencia, las garantías que se deben otorgar a cualquier ciudadano y el desarrollo adecuado de la investigación". En ese sentido, alabó el trabajo desarrollado por la Guardia Civil afirmando que "la respuesta ante este hecho terrible ha sido inmediata”.
“Hay una tranquilidad en que los pasos que se dan son seguros y van en la dirección correcta”, señaló el secretario de Estado de Seguridad, quien hizo hincapié en que “la investigación es rápida y va bien”.
Violencia en el ámbito familiar
Por otro lado, la Subdelegación del Gobierno expresó ayer su condena por los hechos registrados en Montilla. La hipótesis principal defiende que la agresión a la mujer se produjo en el interior del domicilio familiar, tras una fuerte discusión, fruto de las “frecuentes desavenencias” que tenían lugar entre la madre y los dos hijos.
"Era una familia desestructurada, que recibía ayuda de mediación por los conflictos familiares existentes, aunque no existía ningún indicio de que la situación pudiera acabar de la forma en la que lo ha hecho", aseguró el alcalde de Montilla, Rafael Llamas. No en vano, fuentes próximas a la investigación aseguraron ayer a este periódico que el ahora detenido se encontraba prestando servicios en beneficio de la comunidad en el Pabellón Municipal de Deportes como resultado de una pelea en la que se vio envuelto hace unas semanas.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR